Francisco alegre

En los carteles
han puesto un nombre
que no lo quiero mirá:
¡Francisco alegre y olé,
Francisco alegre y olá!
La gente dise
«vivan los hombres»
cuando lo ven toreá;
yo estoy resando por él
con la boquita serrá.

Desde la arena
me dise «niña morena,
¿por qué me lloras,
carita de emperaora?
Dame tu risa, mujé,
que soy torero andalú
y llevo ar cuello
la crú de Jesú
que me diste tú.

Francisco alegre,
corazón mío,
tiende tu capa
sobre la arena
del redondel.
Francisco alegre
tiene un vestío
con un «te quiero»
que entre suspiros
yo le bordé.

Torito bravo,
no me lo mires
de esa manera;
deja que adorne
tus rizos negros
con su montera;
torito noble,
ten compasión,
que entre bordaos,
lleva enserrao
Francisco alegre y olé,
mi corazón.

En mi ventana
tengo un letrero
pa' que lo venga a mirá
Francisco alegre y olé,
Francisco alegre y olá;
en er que dise
«cuanto te quiero,
pero que pena me da:
por curpa de otro queré,
no nos podemos casá».

Rafael de León
español